Los productos «reacondicionados» se han convertido en una alternativa sostenible y económica que muchos contemplan a la hora de adquirir productos de última tecnología y uso cotidiano a muy buen precio. Te contamos qué son y qué debes tener en cuenta antes de lanzarte a comprar uno de estos productos, porque no todos están en las mismas condiciones ni ofrecen las mismas garantías.
Una alternativa que gana adeptos
Los productos reacondicionados están en auge, en gran parte debido a la explosión de las ventas online y al avance vertiginoso de la tecnología, que nos anima a reemplazar rápidamente muchos dispositivos. Frente a ello, quienes apuestan por un consumo racional y sostenible ven en productos ya usados pero en buen estado una opción interesante. Además, cada vez son más las personas que optan por los reacondicionados atraídos por su precio, que llega a muy inferior al precio como nuevo de ese mismo producto.
Optar por un producto reacondicionado es una alternativa sostenible y de ahorro pero antes de tomar la decisión de adquirir un producto reacondicionado, es conveniente que sepas qué cosas hay que tener en cuenta y cómo actuar para evitar un fiasco.
¿Qué es un producto reacondicionado?
Si nos ceñimos al significado literal, un producto reacondicionado es un producto que se ha preparado para que funcione de nuevo correctamente. Ahora bien, esta definición deja muchas preguntas en el aire: ¿cuál es el estado de partida de ese producto (segunda mano, un producto con la caja arrugada, o simplemente abierta, o que le falta algún elemento…), ¿en qué consiste el reacondicionamiento? ¿meterlo en una caja nueva?, ¿revisarlo visualmente?, ¿probarlo para asegurar que funciona?, ¿cambiar sistemáticamente algunos componentes?
Ante la amplia variedad de productos que están relacionados con el concepto “reacondicionado”, es habitual que las tiendas los agrupen en diferentes apartados, pero los nombres muchas veces confunden más que ayudan al consumidor. Para aclarar un poco las cosas: lo que puedes encontrar es desde productos nuevos (últimas unidades o devoluciones de clientes que pueden haber abierto la caja o probado algo el producto), pasando por productos que proceden de exposición (con mayor o menor uso) hasta productos de segunda mano o reparados y restaurados (dispositivos que normalmente han pasado por una empresa que los revisa y repara para dejarlos en buen estado).
La idea que debes tener clara para saber en qué te metes es que no siempre se trata de un producto nuevo y como tal se vende a un precio especial.
¿A quién interesan los productos reacondicionados?
Es una opción que merece la pena explorar si quieres exprimir todas las posibilidades a la hora de adquirir un producto tecnológico, incluso de otro tipo, ya que te puede permitir encontrar auténticas gangas en productos de gama alta que de otra manera a lo mejor no podrías comprar. Pero no te dejes deslumbrar por el término “reacondicionado”, ya que como otros “oportunidades”, “chollos”, “lowcost”, no significan nada si no van acompañado de un buen descuento acorde con el estado real del producto que recibes.
Atento a la garantía y las facilidades de devolución
El mayor problema de los productos reacondicionados es que no sabemos realmente el producto que nos va a llegar, por eso la clave es que fijarse en dos cosas:
- El tipo de garantía que ofrecen. El punto de partida, como productos equiparables a productos de segunda mano, es que la garantía sea de 12 meses, pero es habitual encontrar tiendas que amplían hasta 24 meses o incluso hasta los 36 meses, ya sea porque se trata de productos que consideran «nuevos» o por una ampliación como garantía comercial.
- Que si compras online puedes ejercer el derecho de desistimiento con un plazo ampliado y sin costes adicionales, si el producto no se ajusta a tus expectativas.
Dónde comprar reacondicionados
Prácticamente la mayoría de las tiendas virtuales, y las físicas, cuentan ya con una sección especial en la que se venden productos reacondicionados, pero la variabilidad de lo que ofrecen es muy grande.
Hemos revisado una selección de las tiendas online más importantes de nuestro país para ver qué productos «no nuevos» ofrecen y en qué condiciones. Muchas de las tiendas online son realmente marketplaces (webs que vendiendo o no productos propios, también sirven de alojamiento a otros establecimentos online), por lo que si te decides a comprar a alguna de las tiendas de estos marketplaces, tendrás que verificar con antelación la garantía que ofrecen y las características de los productos que venden,
En la tabla puedes ver qué nos encontramos en cada tienda: cómo llama a estos productos y qué venden realmente (si es fruto de una devolución, un producto en exposición, si simplemente ha sufrido daños de embalaje o si es un producto reparado, o sencillamente, si es un producto de segunda mano). También puedes ver la garantía que ofrecen en cada caso y el plazo de desistimiento de la compra.
Cómo acertar al comprar reacondicionados
1. No des por supuesto nada a la hora de comprar un reacondicionado. Cuando te ofrezcan un producto etiquetado como reacondicionado o con cualquiera de sus variantes (renewed, outlet, refurbished, km 0, etc.) lo mejor es asumir que es un producto de segunda mano y a partir de ahí, valorar si te interesa o no.
2. Valora el tipo de producto que vas a adquirir, y no esperes el mismo ahorro para todos. Plantéate algunas cuestiones:
- Desgaste: algunos productos pueden tener componentes que con el uso se desgastan o agotan su vida útil. Por ejemplo, en productos como móviles o portátiles, las baterías pueden estar ya dañadas si han tenido varios meses de uso. Comrpueba si el producto ha renovado alguno de estos componentes.
- Vicios ocultos. Hay productos que si presentan algún problema se puede comprobar de un simple vistazo, mientras que otros requieren mayor atención.
- Higiene. Algo muy importante en algunos producto, por ejemplo, si se trata de una cortadora de pelo… quizás cuando llegue la des por buena si solo está la caja rota, pero decidas devolverla si está abierta y sospechas que usada.
- Antigüedad del modelo. Compruébala, porque si se trata de un modelo que tiene ya un tiempo quizás te vaya a dar problemas de actualizaciones.
- Componentes. Es habitual que les falte algún componente (los auriculares en un teléfono, instrucciones, las cápsulas de café gratis en la compra de una Nespresso…) o no te puedas beneficiar de alguna promoción que el fabricante tenga para la compra de productos nuevos ya esté registrado en la promoción.
3. Comprueba el ahorro real que vas a obtener. Para ello compara en diferentes tiendas. Desconfía de grandes descuentos ya que muchas veces están calculados sobre el precio de referencia o recomendado por el fabricante y posiblemente esté desactualizado.
4. Utiliza nuestros comparadores para comprobar el precio real de mercado de ese producto.
5. Revisa la descripción del producto. No siempre aparece suficientemente detallada y no te garantiza que sea la correcta… pero al menos es un primer paso.
6. Fíjate en la duración de la garantía. Es importante que sepas cuánto tiempo tienes de garantía y qué incluye. Legalmente, un producto usado tiene que tener una garantía legal de al menos 12 meses, pero algunas webs la elevan hasta a 36 meses, equiparándola con los productos nuevos (esto es algo para valorar positivamente, pues una garantía de 3 años da una gran seguridad). En la práctica, algunos productos reacondicionados se venden con factura como si de uno nuevo se tratara, por lo que no debería de haber problema para hacer uso de su garantía comercial, pero ten presente que ninguna web garantiza que el fabricante mantendrá su garantía comercial.
7. Verifica si la web que te ofrece el producto reacondicionado es una marketplace. Se trata de empresas que actúan como intermediarios entre un consumidor y un vendedor: la mayoría de los casos la garantía y la posible devolución del producto la tendrás que gestionar directamente con el vendedor (que puede que no esté localizado en España, ni en Europa…). Valora los riesgos.
8. Identifica correctamente en la web cómo ejercer el derecho de desistimiento antes de comprar. Este tendrá que ser al menos de 14 días para notificar tu decisión, y a partir de ese momento dispondrás de otros 14 días para realizar la devolución del producto, por tratarse de una compra a distancia. Comprueba también si ejercer este derecho te puede suponer algún coste (gastos de envío). Así podrás tomar más fácilmente la decisión de arriesgarte o no a comprar un producto reacondicionado: el principal problema de los reacondicionados es que su indefinición o una deficiente descripción del estado del producto puede suponer una importante decepción al recibirlo.
9. Cuando recibas el producto que has comprado, revísalo con cuidado. Una medida de precaución, especialmente para productos de mayor valor, es grabar la apertura del paquete hasta identificar que el producto recibido es realmente el comprado.
10. Hay herramientas que te pueden ayudar a verificar el estado y el uso previo que ha tenido ese producto reacondicionado, algo que puede ser útil para los dispositivos tecnológicos (. Valora si te interesa usar una de ellas.
Fuente OCU
¿Quieres consultarnos tu caso?, ¿Tienes dudas?, ¿Quieres conocer tus derechos? Contacta con nosotros sin compromiso o rellena el formulario de contacto que encontrarás en el menú.
Si le ha gustado la información, rogamos invierta unos segundos en darnos 5 estrellas en GOOGLE a través de este enlace:
http://search.google.com/local/writereview?placeid=ChIJ3bjIgtYvQg0Rrl9zllLAENc