¿ES POSIBLE DESPEDIR A UN EMPLEADO POR ABSENTISMO?
La respuesta corta es sí, es posible despedir a un empleado por absentismo. Sin embargo, hay una serie de condiciones que deben cumplirse para que el despido sea procedente.
En primer lugar, el absentismo debe ser injustificado. Si las ausencias del trabajador están justificadas por motivos de enfermedad, maternidad, paternidad, etc., la empresa no podrá despedirlo por ello.
En segundo lugar, el absentismo debe ser habitual. Para que el despido sea procedente, las ausencias deben ser reiteradas y suponer una alteración grave del funcionamiento de la empresa.
En tercer lugar, la empresa debe haber adoptado las medidas necesarias para evitar el absentismo. Esto significa que la empresa debe haber realizado un seguimiento del absentismo del trabajador, haberle advertido de las consecuencias de su comportamiento y haber intentado buscar soluciones para que el trabajador no se ausente de su puesto de trabajo.
Si se cumplen estas condiciones, el despido por absentismo será procedente. La empresa deberá comunicar el despido al trabajador por escrito, indicando los motivos que lo justifican. El trabajador tendrá derecho a impugnar el despido ante los tribunales.
En España, el absentismo laboral es un problema importante. Según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, el absentismo laboral en España en 2022 fue del 7,3%. Esto significa que, en promedio, un trabajador español se ausenta de su puesto de trabajo 7,3 días al año.
El absentismo laboral puede tener un impacto negativo en la productividad de la empresa, en la calidad del servicio o producto que ofrece y en el clima laboral. Por ello, es importante que las empresas tomen medidas para prevenir el absentismo.
Absentismo laboral: qué es y cómo evitarlo
El mundo laboral necesitaba evolucionar…y todavía más desde el comienzo de la pandemia por el Covid-19.
Con tantos cambios, incluido la mayor práctica de teletrabajo, es necesario adoptar nuevas técnicas a la hora de gestionar las jornadas y los horarios de los empleados, así como su productividad. Y es que el teletrabajo, a pesar de tener muchas ventajas, cuenta con algo que atemoriza a muchas empresas: el absentismo laboral.
El absentismo laboral puede afectar no solo a los beneficios del negocio , sino también a la cohesión entre los diferentes departamentos y equipos de trabajo. Si las ausencias constantes o los retrasos de los empleados son frecuentes, lo mejor que puede hacer es investigar qué podría haber detrás de este comportamiento.
En este artículo te explicaremos qué es el absentismo laboral y qué tipos prevé la ley, ¡y te daremos consejos para reducir la tasa de absentismo en tu empresa! También te enseñaremos a calcular la curva de absentismo laboral para que puedas estar al día con este número tan importante.
Definición: ¿Qué es el absentismo laboral?
El absentismo laboral es aquello que ocurre cuando el empleado se ausenta de algún acto o función en la empresa. Es decir, indica ausencias y/o retrasos, sean estos justificados o no.
Sin embargo, el absentismo no solo está relacionado con las ausencias injustificadas y los retrasos; también hace referencia a las ausencias justificadas, es decir, cuando el empleado se comunica con la empresa y disculpa su retraso o ausencia.
Cuando el número de ausencias es elevado, no solo la empresa puede ver comprometidos sus ingresos, sino que todo el equipo y los compañeros pueden verse afectados. Por esto precisamente es importante saber qué hay detrás del comportamiento del empleado, o incluso de un grupo de trabajadores.
El absentismo laboral en el Estatuto de los Trabajadores
La regulación jurídica del absentismo laboral se encuentra en el Estatuto de los Trabajadores, que fue aprobado por el Real Decreto Ley 1/1995 del 24 de marzo. A continuación mencionamos los artículos a los que nos referimos:
El artículo 21.4 establece que la empresa tiene derecho a comprobar el estado o la veracidad de una enfermedad o accidente del trabajador mediante un reconocimiento médico si esto es motivo de ausencia.
Por otro lado, el artículo 52.2 hace referencia a la posibilidad de la extinción del contrato si el ausentismo supone el 20% de las horas laborales durante dos meses consecutivos, o el 25% durante cuatro meses consecutivos. Sean o no estas ausencias justificadas.
Es el artículo 54 según el cual considera un incumplimiento del contrato de trabajo las ausencias injustificadas reiteradas, el cual puede ser causa de un despido disciplinario.
Otro artículo del mismo Estatuto, el 58, expresa la facultad de las empresas de sancionar a los empleados que incurran en este incumplimiento.
Datos sobre el absentismo laboral en España
El absentismo laboral es un problema que afecta a muchas empresas españolas, siendo la tasa de este del 5,3% en el 2018, según el VIII Informe Adecco sobre Absentismo . Esto significa que aquel año, cada empleado se ausentó de su puesto 87 horas por año de media. Ese año fue un máximo histórico, y por eso lo mencionamos en este artículo.
¿Qué gastos supone esto para la empresa y el Estado? La friolera cifra de 7.498,54 millones de euros en prestaciones por incapacidad temporal en la Seguridad Social. Para las empresas, sin embargo, este gasto pasó a ser de 7.000 millones de euros.
Debido a la situación de pandemia y todo lo que esta conlleva, el absentismo laboral no ha disminuido sino que ha aumentado, y es mucho más difícil de gestionar si los trabajadores están teletrabajando.
Acerca de esto último y en relación también con el control horario, siempre tienes que tener en cuenta que en caso de que la cantidad de horas de la jornada laboral de tus trabajadores, hará que el trabajo remoto (o híbrido ) necesite de un acuerdo diferente. De hecho, cuando la jornada laboral supera el 35% desde casa, la ley de teletrabajo establece que será necesario que se realice un nuevo contrato.
Consecuencias del absentismo laboral para la empresa
Ya hemos hablado de cómo el absentismo laboral puede afectar a los beneficios del negocio, el comportamiento y presión de otros compañeros del equipo y en general a todo el clima laboral, pero vayamos punto por punto y analicemos todo lo que puede ocurrir si el absentismo no se gestiona correctamente.
- Reducción de productividad (y beneficios). Con más ausencias hay menos posibilidad de alcanzar los objetivos marcados, y menos si estos son ambiciosos. Si falta personal los procesos se retrasan, se crean cuellos de botella y en general todo se ralentiza o se aplaza.
- Aumento de los costes. Pagar horas extra al empleado que tiene que cubrir la ausencia del compañero supone un mayor coste para la empresa. Si esto sucede a menudo, podemos estar hablando de grandes fugas de dinero.
- Entorno laboral tóxico. Cuando existe absentismo en la empresa, siempre habrá quien se tenga que encargar de las tareas del empleado ausente, y eso no suele ser plato de buen gusto. Con este hecho, aparecen tiranteces.
- Mala cultura de empresa. Las consecuencias del absentismo laboral están estrechamente relacionadas con las causas, sobre todo si estas son injustificadas. ¿Por qué motivo tus empleados se ausentan tanto? Si hay algún aspecto negativo que tenga que mejorarse, esto puede empeorar la cultura de la empresa, que empeorará todavía más con el ausentismo.
- Rotación de personal. Que haya más ausentismo laboral y mayor presión para los integrantes de esos equipos puede hacer que la situación sea insostenible y que tu talento prefiera desarrollarse en otro lugar.
Tipos de absentismo laboral
Hay muchos tipos de absentismo laboral, y todos dependen de si la ausencia es justificada o no.
Causas del absentismo justificado
Estas ocurren cuando la empresa tiene conocimiento de la ausencia o retraso del empleado. Algunos ejemplos de absentismo justificado y previsto por la ley son:
- Problemas de salud y citas médicas. La ley permite que el empleado se ausente para recibir tratamiento médico en caso de enfermedad. No se le debe descontar de su salario si justifica la ausencia con un certificado médico. Vale la pena recordar que las citas o exámenes médicos también son razones válidas para ausentarse del trabajo.
- Fallecimiento. En caso de fallecimiento de un cónyuge o familiar cercano, también es posible ausentarse, sin perjuicio en el salario.
- Problemas con el transporte público. El retraso por motivos de transporte público se puede justificar con RR.HH., con la presentación de alguna prueba: foto, noticia o cualquier otro documento que acredite lo sucedido.
- Baja por maternidad o paternidad. Cuando llega un bebé a casa, o cuando se lleva a cabo una adopción, se debe entender la ausencia justificada y retribuida de los empleados.
Estas son solo algunas situaciones previstas por la Ley. Puedes hacer una gestión de las ausencias y las vacaciones de tus empleados con nuestra plantilla Excel gratuita.
Causas del absentismo injustificado
En este tipo de absentismo la empresa no recibe justificación por el retraso ni por la ausencia de su empleado. Puede suceder en estos casos:
- Problemas personales. Debemos recordar siempre que somos vulnerables a los problemas personales y que estos pueden influir en nuestra vida profesional. No siempre es fácil arreglar las cosas y actuar como si todo estuviera en orden, de ahí la importancia de proponer ayuda y escuchar a tu empleado.
- Falta de motivación. Mantener la energía y la motivación al día es una tarea complicada, más aún si tenemos en cuenta el contexto pandémico en el que vivimos ahora mismo. Uno de los mayores enemigos de la productividad es la sensación de agotamiento que puede enfrentar un empleado, de modo que la empresa debe ayudar y ofrecer incentivos.
- Mala gestión y altos niveles de estrés. Favorecer un entorno de trabajo acogedor es fundamental, y en el corazón de esta prioridad está la salud mental de los empleados. Si se descuida, aumentará el absentismo laboral, ya que el clima empresarial favorece el estrés y ayuda a muchos a evitar y huir de este entorno.
- Falta de claridad en los objetivos. El absentismo laboral se debe a menudo a la falta de comunicación y diálogo con los managers. Sin saber qué hacer, por dónde empezar y qué fechas límite seguir, los empleados pueden sentirse perdidos y dejar de lado sus responsabilidades. El papel principal del manager aquí es poner las cartas sobre la mesa y estipular qué se debe hacer, cómo y cuándo.
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¿Qué se considera absentismo laboral y cuáles son sus consecuencias?
Uno de los principales inconvenientes que se presenta en muchas empresas, es la ausencia de los empleados a su sitio de trabajo. Estas faltas pueden estar o no justificadas y llegan a afectar la productividad así como la eficiencia en el trabajo.
Se estima que solo en España un millón de personas no acuden a su sitio de trabajo cada día, con un 73,6% de ausencias justificadas. El otro 26,4% no tiene justificación para sus faltas, siendo más frecuente el absentismo no justificados en los sectores de fabricación de vehículos, actividades postales y entre los sanitarios.
Esto trae graves consecuencias a muchas empresas, particularmente cuando la ausencia de un trabajador se refleja en fallas al prestar un servicio. Asimismo, produce numerosos inconvenientes en la organización de la plantilla y se estima que en España el absentismo ocasionó pérdidas por el orden de los 8.000 millones de euros solo para el año 2020.
Por esto, es conveniente que conozcas todo lo referente al absentismo laboral, sus tipos causas y consecuencias. También es importante saber calcular el absentismo en tu empresa así como desarrollar planes para disminuirlo.
¿Qué es absentismo laboral?
Se refiere al hecho de que un trabajador no acuda a su sitio de trabajo de manera justificada o no y por tanto está en situación de ausencia laboral. Por tanto, puede ser definido como a la ausencia de un empleado de su puesto de trabajo durante las horas laborables dentro de su jornada.
Con respecto a si la ausencia del trabajador es justificada o no, se reconocen los siguientes tipos de absentismo laboral:
Justificado
En este caso, el trabajador tiene una causa justificada para ausentarse de su centro de trabajo y lo comunica con antelación a la empresa. Aquí se incluyen las bajas por incapacidad temporal, maternidad y paternidad, entre otras.
Igualmente, es absentismo justificado cuando el trabajador solicita tiempo para atender gestiones personales, realizar visitas médicas o cumplir con obligaciones electorales. Este tipo de absentismo es menos problemático para la empresa, ya que al saberlo con antelación puede organizarse para no afectar el proceso productivo.
No justificado
Ocurre cuando el trabajador no acude a su sitio de trabajo sin avisar previamente ni presentar un justificante. De entregar una justificación a su falta y hacerlo de forma recurrente, este puede ser motivo de despido disciplinario del trabajador.
En el contrato colectivo que ampara al trabajador, pueden existir sanciones asociadas al absentismo no justificado. Además, si no llegas a un acuerdo con la empresa para recuperar las horas perdidas, te pueden descontar el día de salario y el equivalente en las pagas extra.
Presencial
Este tipo de absentismo es el más difícil de detectar y se refiere a cuando el empleado acude al centro de trabajo, pero no realiza las labores que debe cumplir. En muchos casos ocupa su tiempo en actividades como revisar su teléfono móvil personal o haciendo uso de internet por motivos no profesionales.
Principales causas del absentismo laboral en España
El absentismo laboral es un problema que afecta a la mayoría de las empresas españolas y es importante conocer cuáles son sus causas principales. De esta forma, será mucho más sencilla la implementación de un plan eficaz para reducir las faltas al trabajo.
Causas médicas
Es frecuente que los empleados falten varios días de forma justificada por alguna dolencia menor. Entre las más comunes están los trastornos a nivel músculo esquelético, ya que más del 84% de los trabajadores han manifestado presentar diversas molestias por posturas durante la ejecución de sus tareas.
Además, son frecuentes los problemas respiratorios así como algunas enfermedades crónicas que presenten los trabajadores. En general, el mayor porcentaje de absentismo en España está asociado a incapacidad temporal por algún tipo de problema de salud.
Causas laborales
Un motivo frecuente para faltar al trabajo de forma no justificada es que los empleados no se sienten motivados ni identificados con la empresa. Asimismo, esto ocurre cuando las condiciones en el sitio de trabajo no son idóneas para que puedan cumplir con sus tareas de forma eficiente.
Además, en muchos casos no se realiza una supervisión adecuada de los trabajadores que lleva al absentismo presencial. Igualmente, si no se tiene una adecuada política para reducir los riesgos y accidentes laborales, el empleado no se sentirá motivado a asistir al centro de trabajo.
Causas económicas
Cuando el trabajador no recibe una remuneración adecuada a su formación y rendimiento, se siente poco motivado a asistir al sitio de trabajo. Asimismo, se puede ver influenciado por la falta de políticas de estímulo para ascender en la empresa así como de programas de formación para seguir mejorando en el plano profesional.
Causas personales y familiares
Otro motivo frecuente para el absentismo laboral es la falta de conciliación familiar y laboral. Por ejemplo, que el empleado deba atender a un familiar con discapacidad o los hijos cuando se encuentran enfermos.
También son frecuentes las faltas para atender gestiones personales, acudir a visitas médicas o a eventos académicos. A veces también ocurren ausencias laborales por motivo de fuerza mayor como, por ejemplo, fallas en los servicios de transporte público.
¿Cuántos días puedo faltar al trabajo sin baja?
Según se contempla en la legislación laboral, puedes faltar al trabajo por causas de salud por un máximo de tres días si cuentas con un justificante médico. Este período de ausencia del trabajo se considera no retributivo a menos que se encuentre contemplado en el contrato colectivo.
Una vez que has obtenido el justificante médico, es necesario comunicar al centro de trabajo la ausencia laboral. Posteriormente, este se debe consignar ante departamento de Recursos Humanos de la empresa a fin de evitar algún tipo de medida disciplinaria.
Despido por absentismo laboral
Como ya hemos comentado, el absentismo laboral es uno de los problemas más frecuentes entre los trabajadores. Por tanto, las faltas injustificadas repetidas están contempladas en el artículo 54 del Estatuto de los Trabajadores como causa de despido justificado.
El absentismo laboral injustificado se considera una falta muy grave y suele ser objeto de despido cuando se tienen tres días continuos de faltas sin justificación. Asimismo, es motivo de despido cuando la ausencia al centro de trabajo es de cinco días durante el período de un mes.
El despido por absentismo injustificado suele ser procedente y el trabajador no goza de derecho a una indemnización. Por tanto, se debe ser cuidadoso con ausentarse del trabajo sin justificación de forma recurrente.
Hay otras sanciones más leves asociadas al absentismo laboral cuando se falta un día en el lapso de un mes. En este caso, se puede suspender el salario por un máximo de dos días y recibir una amonestación escrita o verbal.
Por otra parte, cuando las ausencias no justificadas van de los dos hasta cuatro días en un mes de trabajo la falta es tipificada como grave. El empleado puede recibir una amonestación y se le suspende el salario entre tres a un máximo de catorce días.
¿Cómo llevar a cabo el cálculo del absentismo laboral en una empresa?
A fin de llevar el control del absentismo laboral y determinar si es un problema grave en tu empresa, es importante que tengas un método para estimarlo. Los profesionales de recursos humanos han desarrollado distintas metodologías que son utilizadas para tal fin.
Entre los más utilizados encontramos los siguientes:
Índice de Absentismo Laboral (IAL)
Se estima como un porcentaje entre el número de horas de ausencia de todos los trabajadores entre el número de horas que se trabaja en la empresa. Para esto, se utiliza la siguiente fórmula:
IAL= (Número horas totales absentismo/Número total de horas trabajadas) x 100
Al hacer el cálculo requieres tener a mano el número total de horas que ha trabajado toda la plantilla de la empresa así como las horas totales de ausencia de todos los trabajadores. El primer valor se obtiene de las horas asignadas a cada trabajador ya sea por jornada o turno.
En el cálculo de las ausencias, se debe incluir tanto las que son justificadas como las que no lo son. Para hacerlo más sencillo, a continuación presentamos un ejemplo:
- Una empresa tiene 15 empleados con una jornada laboral de 8 horas por 30 días al mes. Por tanto, las horas de trabajo planificadas son: 15 x 8 x 30= 3600 horas en un mes.
- Durante este período, 2 empleados se ausentaron dos días por enfermedad, 3 llegaron con una hora de retraso y dos se fueron con dos horas de antelación a casa.
- Las horas de absentismo son:
Ausencia: 2 x 8 x 2= 32 horas.
Atrasos al llegar: 3 x1 = 3 horas.
Salidas anticipadas: 2 x 2 = 4 horas
Total horas absentismo= 39 horas
- Entonces el IAL se calcula de la forma siguiente:
IAL = (39 horas de absentismo/3600 horas trabajadas) x 100= 1,08%
Factor de Bradford
Este índice permite detectar los empleados particulares que muestran un mayor porcentaje de ausencias al trabajo. Para esto, se requiere conocer el número de horas de ausencia de un trabajador en un período determinado así como el número de días que suman estas faltas.
Factor de Bradford= n^2 x d (donde n son las ausencias de un trabajador en un período determinado y d el número de días de las bajas).
Plan contra el absentismo laboral para disminuir las pérdidas en la empresa
El índice de absentismo laboral en España se sitúa en promedio entre 5,2 a 5,3% y supera el 7% en algunas Comunidades Autónomas. Si tu empresa presenta valores iguales o superiores a estos, es importante diseñar un plan que ayude a reducir las pérdidas por esta causa.
Los departamentos de Recursos Humanos, deben hacer la medición del absentismo laboral así como determinar sus causas principales. Con base en esta información, se debe desarrollar un plan de acción para disminuirlo.
Entre algunos de los pasos que se deben seguir, están los siguientes:
1. Definir políticas claras con relación a las ausencias
En primer lugar, los empleados deben conocer con claridad cuáles son las políticas de la empresa con relación a las ausencias al trabajo. A este fin, lo más conveniente es desarrollar una normativa que indique los horarios así como los mecanismos de control de asistencia de los trabajadores.
Estas normas deben ser cumplidas por toda la plantilla, incluidos los supervisores a fin de brindar ejemplo. Igualmente, se debe establecer con claridad los pasos a seguir por el empleado en caso de una ausencia.
2. Flexibilizar horarios
Una de las principales causas del absentismo laboral, es la falta de conciliación entre la vida familiar y laboral. Por esto, siempre que sea posible para el funcionamiento de la empresa se pueden adaptar horarios a las necesidades particulares de cada empleado.
También es posible implementar formas de trabajo a distancia para aquellos trabajadores a los que se dificulte la llegada al centro de trabajo. Para esto, es importante contar con un mecanismo de control horario adecuado.
3. Establecer protocolos claros y sencillos para la gestión de permisos
En muchos casos los trabajadores desconocen los pasos a seguir para gestionar distintos tipos de permisos. Mientras que algunas empresas tienen protocolos engorrosos que hacen las gestiones lentas y por tanto, se promueve el absentismo laboral.
Se debe procurar que la plantilla conozca los pasos a seguir y que el departamento de Recursos Humanos cuente con plataformas que faciliten las gestiones. Esto permitirá organizar mejor la jornada laboral de los trabajadores y evitar los problemas derivados del absentismo.
4. Mejorar los programas de bienestar de los trabajadores
Por lo general, muchos trabajadores faltan al trabajo porque no se sienten motivados, tienen problemas de estrés o dolencias asociadas a sus labores. Así que es importante tener programas que ayuden a mejorar la salud de los empleados y contar con el mobiliario y equipos para que realicen sus tareas en las mejores condiciones posibles.
Igualmente, se deben promover programas de motivación y estímulo a aquellos trabajadores que tienen un mayor rendimiento. También es importante controlar los riesgos y accidentes laborales a fin de brindar mayor seguridad en el centro de trabajo.
Causas justificadas para faltar al trabajo
Según el Estatuto de los Trabajadores, hay diversas causas que justifican la falta al trabajo por parte de los empleados. Las principales causas justificadas son:
- Cuando se participa en una huelga de carácter legal.
- Si se cumple con actividades de representación de los trabajadores.
- Baja por maternidad, riesgos durante el embarazo, lactancia o paternidad.
- Cuando se realizan exámenes prenatales así como preparación del parto o acogida en caso de adopción.
- Licencias especiales por matrimonio o defunción.
- Para el cumplimiento de un deber inexcusable de carácter personal y público.
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